La bareta y su estrecha relación con la música

Publicado por lossixpistols | | Posted On miércoles, 28 de octubre de 2009 at 5:30

Buenas las tenga todo aquel que se tope con este blog, mejor dicho ¡ahora sí se armo jijuemadre!, algo nunca antes visto: 6 brillantes mentes, 12 prodigiosas manos escribiendo al unísono, jajaja, en fin…

Como introducción le podemos decir que los pistols es la unión de seis blogueros de la vieja escuela, algunos ya estamos retirados y otros no volvimos a nuestras épocas de gloria, como dice el encabezado somos tres tipos y tres damiselas disparando letras a lo desgualetao, Alicia, Catalba, Collective Soul, El Cuajinais, Kar-Eq y Leonela (orden alfabético), quizá haya oído hablar de nosotros y si no, pues "sígase" y lea que no le quita más de 3 minutos, además con humildad les decimos que no hay desperdicio, oro puro señoras y señores.

JUANMA – COLLECTIVE SOUL

Para aclarar el titulo del post, ¿No le parece a ud. que muchas canciones tienen una letra realmente extraña? Bueno, claro está que hay otras que tienen una realmente cula como la de Christian Castro “Azul como el mar azul”, no pues ¡qué descubrimiento huevon!... pero en fin, no me refiero a esas canciones, sino a aquellas que lo ponen a pensar a uno “¿En qué berriondos estaba pensando esa persona cuando la escribió?” “¿Será que le estaba pegando a la bareta fuertemente?”.

Algo que nos parece interesante, es que no hagan referencias directas a la sustancia o el alucinógeno que los está inspirando, cosa que sin más ni más hacían bastante músicos de la escena del rock, como por ejemplo Ozzy Osbourne cuando estaba en Black Sabbath dejó claro que le pegaba a una que otra cosita para colaborarle a la imaginación, en canciones como “Sweet Leaf”, “Snowblind”, etc.

Pero pues hay varias joyitas nacionales e internacionales que también creemos que le jalan al porro y demás sustancias que les ayudan de pronto a inspirarse un poquito más. A lo largo del post vamos a dar nuestras razones del porqué la bareta juega un fuerte papel en toda la industria musical, así que relájese y disfrute…

Para empezar, algunos ejemplos básicos de canciones bareteras:

“Lloran los Guaduales”

Creo que todos en algún momento de nuestras vidas hemos escuchado esta canción: “Lloran lloran los guaduales, porque también tienen alma. Y los he visto llorar. También los he visto alegres, entrelazados mirarse al río, danzar al agreste canto”. Creo que alguien alguna vez dijo que la canción hace referencia a que cuando sopla mucho el viento, éste se cuela entre los guaduales y los hace sonar de una particular manera, pero entonces, ¿Será que el man que escribió la letra se metió algo extraño y se sentó en una plantación de guaduales a pensar maricadas? yo no sé, pero mí me parece que sí. Además ¿Qué es eso de que lloran y después los ve alegres?...no pues, ¡maniaco depresivos los verriondos! ¿Ah?

“The Night” (by Joe Stream)

Cómo no, aquel clásico de Joe Arroyo, reencauchado (suena sabroso esta palabra, ¿no?) después por Juanes. Sí, la canción digamos que ‘aguanta’ -por decirlo de alguna manera-, pero ¿Alguien nos puede decir de dónde se le ocurrió a este señor meterle un “Kiki kiri kiki” a grito herido a la misma? ¿Por qué hizo eso? La verdad es que no vemos otra razón diferente a que el man se metió algo extraño a la cabeza y ¡tomalo! que por arte de magia apareció el gallo cantando…

CATALBA

Pero si de enmarihuanados hablamos, debemos dedicarle un puesto de honor al ídolo de madres y tías: Juan Fernando Velasco.

Este romántico ecuatoriano es un derroche de imaginación y pereza increíble, porque presiento que cuando no encuentra la palabra correcta para su composición, simplemente pone la primera que ve al abrir un directorio. Para la muestra, estos hermosos y delirantes fragmentos que podemos encontrar en su canción “Chao Lola”:

- “Hoy que juegas fuegos para ver si me amas”
¿Qué es jugar fuegos?, querrá decir juegos pero es como los niños que dicen ¿fugamos papá?

- “Déjame soñarte entre tus delfines”
Lo lamento, no logro interpretar nada. Esta frase es absolutamente indescifrable para mí.

“Las conversaciones y el espagueti todo lo que fuimos nada vale ya”
Sin duda la mejor. Hágame el favor, ¿De qué coño hablas Juanfer? ¿Te mandas un tenedorazo de pasta boloñesa y empiezas a hablar?

KAR-EQ

Sin embargo, los anteriores son principiantes al lado de mi elegido, aquel por el cual me he peleado con amigas y novias que intentan defenderlo con argumentos casi tan absurdos como sus canciones. Me refiero a un señor Guatemalteco que no sólo le pega a la bareta, sino que se fuma el cilantro, mete azafrán y hongos. Puedo apostar que no es sorpresa para la mayoría que está leyendo este post la presencia de Ricardo Arjona con su poesía barata y su maltrato al idioma Castellano. En fin, el tipo es capaz de hacer rimar a la fuerza Rock & Roll con Stallone o Forrest Gump con Donald Trump, pero sus rimas creo que merecen un capítulo aparte; si en algo se le nota lo embaretado que mantiene es en su “capacidad” para componer:

Empiezo con unos pequeños ejemplos como aperitivo, si quieren profundizar escojan una canción al azar, la que sea y encontrarán cosas peores (hay que entender que van dirigidas a un mercado especifico como son empleadas del servicio, aseo, celadores y personas que se criaron a punta de novelas de Corín Tellado, cosa que no tiene nada de malo, es bueno que alguien piense en ellas, ya tienen su Neruda).

“Acompáñame a estar solo, a purgarme los fantasmas” no entiendo cómo carajos a uno lo pueden acompañar a estar solo, lo peor es que muchas mujeres se derriten cuando escuchan esa frase que no tiene sentido alguno. Es como decir “mátame para estar más vivo” o “ahoguémonos respirando”, y lo de purgarse los fantasmas es la cereza sobre el pastel pero del pastel de pollo, ese toque de coquetería que no tiene porque estar ahí. Ricky, te cuento que hay una cosa que se llama coherencia, la idea no es poner frases sueltas a lo loco.

Claro que mi favorita de lejos es “Cómo encontrarle una pestaña a lo que nunca tuvo ojos”, no sé qué decir al respecto, creo que habla por sí misma y representa la esencia de Arjona, una frase para la inmortalidad y mis felicitaciones para los que entiendan la metáfora. Yo lo veo como un relleno que se le ocurrió mientras se peinaba las pestañas, o les ponía de esa cosa para engrosarlas, se me olvida el nombre; en fin, la frase se volvió el lema de batalla para todos los que aborrecemos al baretero de Arjona, capaz de despertar amores y odios, de hacer creer que toda la mierda absurda sin sentido que sale de su boca es poesía.

Arjona es también conocido por frases como “Jesús es verbo no sustantivo”; “tu caviar y yo tortilla, quien diría”, “Si te viese tu jefe desnuda y detrás no dudaría en promover tu cintura” o “Instalé la Osa Mayor en tu diadema y tú seguías ahí como si nada”, son muchas las frases, el mensaje seria ‘Di no a las drogas o terminarás como Arjona’, componiéndole canciones a una silla o a una lámpara.

LEONELA

Pero es que además uno empieza a mirar y la “baretez” no respeta ni genero ni edad, ni nacionalidad, ni nada... porque para no ir más lejos, ¿Dónde me dejan a don Lisandro Mesa con: “Quién pudiera tener la dicha que tiene el gallo...”? ¿Acaso la reproducción es cosa sólo de aves? Todos podemos tener esa dicha. ¿O no? Es que mientras uno tenga su huevito diario pues ¿Qué carajos importa la vida sexual avícola?.

Además, esa frasecita de: “El gallo sube”… ¿Eso qué quiere decir? o no será que el man quiso decir: “El gallo SE sube”. ¿Y si se sube qué? Bien dicen por ahí que cada uno hace de su “ass” un candelabro y si a la gallinita así le gusta pues ¿Qué podemos decir el resto de los mortales?.

Siguiendo en el plano animal, ¿Qué tal “Los pollitos dicen pío pío pío, cuando tienen hambre, cuando tienen frío”? ¿Qué tal eso? Si un par de pollos dicen pío, la pobre gallina tiene que salir en pura a adivinar qué tienen porque esa palabra sirve tanto para hambre como para frío, y agarre a buscar maíz a y trigo pa’ darles la comida y prestarles abrigo. ¿Y ella que? Que se la coma el tigre... ¡muy bonito!.

Otro ejemplo palpable es nuestro ya nombrado Cristian Castro y su bella canción: “Lloran las rosas”: “Lloran las rosas porque no puedo estar sin ti y lloran celosas de que no quieras ya venir…”. No entiendo. Muy de buenas el man que tiene algo que chille por el. Eso es una ventaja porque nadie le estaría viendo a uno el ojo hinchado luego de llorar a mares por que lo dejaron. Pero ¿Cómo así que lloran celosas de no quieras ya venir? ¿Cómo así? ¿Celosas de quién? ¿Uno cómo se va a poner celoso de algo que no quiere?

Esto me pone a pensar en que si lloran los guaduales y las rosas también, estamos al borde de una depresión vegetal imparable…

EL CUAJINAIS

He de reconocer que esperaba más prosa venenosa contra aquellos artistas de las pistas que nos encantan cuando cantan con su inventiva creativa y su poesía… mmm… de fantasía. ¿Cómo lo ven?... sólo falta meterle una comparación ridícula y ya me puedo dar en la jeta con Arjona ¿O no?

Pero bueee, yo la verdad no le voy a dedicar mi breve espacio a criticar al guatemanteco, sino a rajar con sentida indignación por la existencia de algunas letras que definitivamente parecen hechas con el único fin de reafirmar eso de “¿Rock?... ¡esa es pura música de mechudos mariguaneros!”(Porque yo lo pronuncio y lo escribo don ‘g’).

Y es que, ¿Quién no va a pensar eso después de oír a Cerati hablando de “Picnics en el 4B” o de “Mares de fondo y no caer en la trampas… y acertijos bajo el agua” y otro poco de maricadas?... o después de tratar de entender por qué todas las barras brevas del continente adoptaron como propia la canción “Mariposa Tecnicolor” de Fito Páez “…ellas cocinaban el arroz, él levantaba sus principios de sutil emperador…”

Porque eso sí, ¡pa’ bareteros los argentinos! Casi que se podría decir que el talento de sus grupos es directamente proporcional al nivel de tueste de quienes componen sus canciones. Y ejemplos hay como arroz; pero teniendo en cuenta lo extenso que resultaría un tratado completo sobre este tema, hablaré simplemente de quienes para mí son los reyes de la incomprensión lírica en esta parte del mundo: los señores de Illya Kuryaki and the Valderramas (que ya evidencian la traba desde su bautizo como grupo).

Y bueno, pues qué hps; ya untado el dedo, untada la mano… ¡debutemos con concurso! Premio especial para quien nos explique qué putas significa eso de “...yo tengo hijos en los ocho continentes y a todos ellos yo les saqué los dientes… con eso yo construí un gran puente para pasar pa’l otro lao e’ las serpientes…” (De su mega éxito “Abarajame la Bañera” y sólo pongo un pedacito, pero frescos que toda es así. Parecen los votos matrimoniales de Homero).

Nooo, qué va. A mí no me vengan con cuentos. ¡Eso que ustedes oyen es pura música de mariguaneros!

ALICIA

Pero es que ese trabajo de compositor ¡sí debe ser bien complicado oiga! Hay que reconocer que como en todos los oficios, no falta el mediocre que demerita la profesión, (¿Ven lo que hacen la desesperación y la presión de las disqueras? ¡Ya me puse fue de abogada de los pobres!

El chiste es que este post evidencia que la bareta influye en todo tipo de composiciones: música de plancha, rock, colombiana, tropical… y para acabar de cerrar el círculo, les va una perla, de Pablo Milanés: “Yo no te pido que me bajes una estrella azul, sólo te pido que mi espacio llenes con tu luz…” A ver, vamos por partes: primero ¿Qué es eso de bajar estrellas? ya está lo suficientemente extraño, y ya desde ahí se evidencia el efecto de los alucinógenos, pero yendo más allá, ¿De cuándo a acá las estrellas son de colores? Y para rematar el asunto, como para calmar al destinatario de semejante oración, debe quedarle claro que no necesita bajar una estrella, ni mucho menos encontrar una azul, porque finalmente lo que se le pide es que “mi espacio llenes con tu luz”, ¡Como si fuera más chimbo!

Ahora bien, debemos reconocer que eso de que el título de la incoherencia en las letras se lo llevan los argentinos, es cierto de toda certeza y uno que puede tener el título de campeón es Andrés Calamaro, del cual bien podría hacerse un post aparte, pero sólo para ponerles un ejemplo: “Pero quiero volver a mi casa, a alguna casa, para encontrar a esa princesa vampira que respira, que respira y me mira”. ¡Definitivamente fuera de concurso! No tenemos ningún otro comentario que hacer al respecto.

Creo que hemos expuesto suficientemente los efectos de las sustancias alucinógenas en la producción de letras para canciones, y cómo no se trata de una práctica exclusiva de los roqueros, aunque nos quedó por fuera el “reggaetón”, pero ese es un tema que requiere, primero un curso intensivo del léxico que manejan estos singulares personajes y por supuesto una investigación exhaustiva, para la que creo que no nos asiste ni tiempo, ni interés, ja ja ja.